Exigen asociaciones civiles de Michoacán activar la alerta de género

Exigen asociaciones civiles de Michoacán activar la alerta de género

Para Circe López Riofrío, fundadora de "Humanas sin Violencia", Michoacán debió haber declarado la alerta de género desde hace por lo menos dos años atrás

lasillarota.com| MICHOACÁN| Miércoles, 09 de Marzo de 2016| 08:16

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A Guillermina Esquivel la mataron en el mismo lugar en el que descansan los restos de su esposo Jorge, una fría mañana de principios de diciembre del año pasado.

La mujer de 67 años había ido ese  día a limpiar la tumba de su esposo que se encuentra en el lote "G" del saturado panteón municipal de la ciudad de Morelia, y se había percatado de que el cementerio estaba más gris y más solo que de costumbre.

Como cada semana, limpiaba las hojas, la basura y la tierra acumulada en ese pedazo de concreto mientras se sumía en un dialogo imaginario con el difunto, que la hacía sustraerse del mundo.

Quizás por eso no se dio cuenta del momento en el que se acercó un muchacho que se había metido al panteón para drogarse a sus anchas, con la "mona" que recién había conseguido.

Cuando se acercó a Guillermina le arrebató primero el celular, cuando recién había colgado la mujer de hablar con su hermano Miguel Ángel que vive en Monterrey y que por un extraño presentimiento le había recomendado que no volviera tarde a casa.

Su agresor le tapo primero la boca con su mano sucia y pesada, y la agredió con algo que la hizo perder el conocimiento;  luego, fue fácil para el corpulento hombre arrastrarla hasta el final del lote "Z", donde la violó en repetidas ocasiones para finalmente estrangularla y dejar su cuerpo abandonado, como un trapo descolorido.

En la averiguación ministerial, integrada en la carpeta de investigación MOR/053/7599/2015, los peritos de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) determinaron que Guillermina Esquivel "murió víctima de  fue asfixia mecánica por estrangulamiento",  y detectaron que se usó un arma no especificada para ahogarla.

Esta conclusión se logró solo después de la insistencia de los familiares de la víctima, que una y otra vez y en todos los tonos demandaron a la fiscal Araceli Palomares Miranda, para que tratara el caso como un  feminicidio, y no como un crimen más.

De hecho el hermano mayor de Guillermina, Miguel Ángel relata que el caso estuvo a punto de ser archivado cuando los primeros peritos habían determinado que no había huellas, ni indicio alguno que probará que la mujer había sido víctima de un ataque sexual y físico, e incluso declararon a bote pronto, que Guillermina había muerto "de causas naturales".

"Mi hermana fue violada, ultrajada  y asesinada a plena luz del día, en un lugar público. Igual pudo haber ocurrido en plena plaza del centro, frente a Palacio de Gobierno y a cualquier otra mujer.  ¿¡Y que!? nadie oyó nada ?", pregunta impotente y en voz alta Miguel Ángel.

El cuerpo sin vida de Guillermina fue hallado la mañana del 4 de diciembre del 2015, tirado, sucio y arrumbado junto a unos tambos de basura.

Solo después de la investigación realizada por la Unidad Especializada en Escena del Crimen de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), se pudo determinar que los hechos ocurrieron entre las 15:00 y las 15:30 horas aproximadamente, y que el celular desde el cual había entablado la última conversación Guillermina con su hermano Miguel, había sido vendido en 200 pesos, que le sirvieron a su agresor para seguir drogándose ese día.

Para Circe López Riofrío, fundadora y presidenta de la asociación civil "Humanas sin Violencia", Michoacán debió haber declarado la alerta de género desde hace por lo menos dos años atrás.

De acuerdo a los datos de esta AC, entre el 2008 y el 2014, fueron asesinadas en el estado 623 mujeres, es decir 89  mujeres por año en promedio, y en el 2015 la estadística subió a 90.

Pese a ello, el procurador del estado, José Martín Godoy Castro, consideró apenas el 7 de marzo pasado que  "en Michoacán no existe una contingencia que requiera que se declare la alerta de género".

El funcionario aseguró que la entidad ocupa uno de los últimos lugares (el 25)  en cuanto a incidencia delictiva de este tipo, y enfatizó que "se debe ponerse mayor atención a estados con más violencia".

La titular de la Secretaria de Igualdad Sustantiva y Desarrollo de la Mujer, Fabiola Alanís Sámano, por su parte reconoció que este 2016 "Michoacán no logrará obtener la declaratoria de alerta de género", que fue solicitada a la federación el año pasado por el propio gobernador, Silvano Aureoles Conejo, cuando estaba en campaña.

Dijo que debido al número de feminicidios que se tienen registrados en los últimos años en la entidad "el estado no ocupa de manera urgente esta declaratoria".

Según la funcionaria, entre los años 2014 y 2015, "se registraron -solo- siete  feminicidios", entre ellos el de Guillermina Esquivel.

Circe López Riofrio, se dijo decepcionada por estas declaraciones y enfatizó que organizaciones como la que dirige, continuarán insistiendo en la declaratoria de alerta de género, sobre todo en la zona de Tierra Caliente del estado, en donde asegura que hay una cifra oculta de estos casos.

El presunto violador y homicida de Guillermina fue capturado el pasado 2 de marzo.

De acuerdo a un comunicado de la PGJE, el agresor fue un joven de 22 años que se dedicaba a limpiar parabrisas en la Calzada La Huerta, una de las principales arterias de la ciudad de Morelia, que se localiza a menos de 50 metros del panteón municipal.

La dependencia informó en el escueto boletín que luego de las averiguaciones judiciales se determinó que el hombre -del que no fue dado a conocer su nombre- habitualmente se desplazaba a plena luz del día al panteón para drogarse, sin que fuera detenido por los guardias del lugar.

 

kach