Ser pobre en México, el laberinto que no tiene salida

Ser pobre en México, el laberinto que no tiene salida

Ser pobre en el país es no tener acceso a educación, es ser marginado, carecer de servicios médicos. Ser pobre es muy caro, dice especialista.

lasillarota.com| CIUDAD DE MÉXICO| Martes, 30 de Agosto de 2016| 16:49

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Ser pobre en México es estar dentro de un círculo del que es prácticamente imposible salir, ya que, paradójicamente, ser pobre en este país implica gastar mucho y tener muy poco, por eso acumular es una cuestión idealista. Ser pobre es no tener educación. Vivir enfermo. Ser marginado. Y más. Lo anterior se basa en un artículo publicado en la página de la Universidad Iberoamericana que se basa en una entrevista con la académica del Departamento de Economía Gabriela Luna.

 La peor educación

El promedio de escolaridad en México es de 6.5 años, que además de pocos son de mala calidad. En principio, el panorama con seis años de escolaridad luce decepcionante ya que será muy difícil acceder a un salario alto. El camino de una persona con esta escolaridad es, en la mayoría de los casos, empleos de salarios muy bajos y casi siempre informales, explicó la especialista.

 Relaciones interpersonales

Además las personas de poder que podrían recomendarlos o ampararlos para poder aspirar a tener un empleo con salarios más decorosos, son muy lejanas. Las diferentes clases sociales no se mueven en los mismos espacios ni interactúan entre sí, según Gabriela Luna.

 Mala alimentación

Por otra parte, la dinámica laboral informal en la que se encuentran inmersos impide que accedan a comedores institucionales, de tal forma que la comida deben buscarla en la calle e invertir buena parte de su poco sueldo en eso.

 Deficiente transporte

Las personas pobres, regularmente viven en zonas marginadas de la ciudad o afuera de la misma de tal manera que les sale más caro trasladarse que a alguien de una zona céntrica, tienen bajo nivel de comunicación con las zonas a las que, muchas veces, deben trasladarse para trabajar. Ya que descontamos lo que deben gastar en alimentación y vivienda, el transporte ocupa el 22 por ciento de su ingreso, en promedio, dijo la doctora en Economía.  

 Deplorable salud

Además a las personas con los más bajos ingresos les sale caro serlo porque regularmente aplazan la atención a su salud, ya que lo pueden ver como un gasto innecesario o un gasto fuera de su alcance presupuestal.

"Cuando enferman a lo mejor empiezan con un síntoma leve que atendido a tiempo podría ser totalmente curable. Pero como van postergando su atención cuando acuden al médico o a un servicio de salud resulta que ya es una enfermedad agravada y de consecuencias importantes que les impedirá ser productivos, y por supuesto les saldrá más caro el tratamiento", mencionó la especialista.

A esto se le suma que los servicios de salud a los que puede acceder una persona pobre son sumamente deficientes y con personal poco calificado, para tener medicamento será necesario que se hagan de sus propias medicinas. "Incluso el 20% de los más pobres de este país pueden caer en gasto catastrófico por comprar una suspensión estomacal", comentó Luna.

Las faltas al trabajo, si se encuentran en un trabajo informal, además del gasto en medicamento, serán un duro golpe para su economía familiar, ya de por sí bastante mermada por los otros aspectos que consumen su poco dinero. El 30 por ciento de la población más pobre del país vive prácticamente enferma, según Gabriela Luna.

 Ser viejo y ser pobre

En México hay alrededor de 4.2 millones de adultos mayores que viven en condiciones de pobreza, lo que quiere decir que la mitad de los adultos mayores vive en una situación muy precaria. De todas estas personas de la tercera edad se estima que sólo 6.4 por ciento tiene acceso a servicios médicos. Los niños y adultos mayores mueren de enfermedades relacionadas con la pobreza como gastrointestinales y pulmonía, mencionó Luna.

 Marginalidad

Ser pobre casi siempre es ser marginado y ser marginado implica habitar los lugares menos desarrollados del país, en calles sin pavimento, y sin servicios públicos, es habitar los lugares más inseguros. El 38% de los mexicanos que no tienen agua potable, habitan zonas de alta marginalidad.  

 Corrupción, lo normal

Por si fuera poco, que no lo es, ser pobre también significa ser más susceptible a la corrupción. La falta de información y de conexiones sociales que puedan brindar asesoría en instancias gubernamentales los hacen caer víctimas de prácticas de cohecho para resolver sus problemas. En esto gastan el 23 por ciento de sus ingresos casa año, refiere la especialista.

 Cómo se combate

Para la especialista el problema de la pobreza se debe combatir desde distintas esferas sociales. Pero dice que de manera urgente el gobierno debe poner prioridad a su política social.

MLR