Exalcalde de Silao acepta que mandó golpear a reportera

Exalcalde de Silao acepta que mandó golpear a reportera

Enrique Benjamín Solís Arsola fue sentenciado a dos años de prisión por la agresión

REDACCIÓN  | lasillarota.com| | Sábado, 22 de Julio de 2017| 13:55

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El exalcalde de Silao, Enrique Benjamín Solís Arsola, fue sentenciado a dos años de prisión, al confesar que ordenó al ex director de Policía, Nicasio Aguirre Guerrero, que golpeara a la periodista, Karla Silva Guerrero.

El exfuncionario priista fue declarado culpable por lesiones calificadas y amenazas contra la periodista del El Heraldo.

Pese a la sentencia no permanecerá en la cárcel, porque tiene el beneficio de la libertad condicional.

Además, sólo le resta purgar 7 meses y medio de condena, porque durante el proceso en su contra ha pasado un año y cuatro meses en el Centro de Readaptación Social (Cereso).

El juez le puso una pena de 3 mil 500 pesos, la reparación del daño, de la cual no se ventiló el monto, y no podrá ocupar cargos públicos durante dos años.

Durante la audiencia, Solís Arzola pidió una disculpa a Karla Silva por mandarla golpear, solo porque le molestaban sus notas.

Los hechos

"¡Bájale de huevos a tus pinches notas o te a cargar la chingada!", fue la amenaza que recibió Karla Silva, cuando era golpeada por José Samuel Ornelas Martínez, con el apoyo de Luis Gerardo Hernández Valdenegro y de Joaquín Osvaldo Valero Garnica.

La agresión se consumó el 4 de septiembre del 2014, en el interior de la oficina de El Heraldo en Silao.

El 13 de marzo del 2016, la juez Gloria Hernández Valtierra vinculó a proceso penal al ex alcalde por ser el instigador para que el director de Policía, Nicasio Aguirre Guerrero, ordenará al subdirector de la corporación, Jorge Alejandro Fonseca Durán, contratar a personas que golpearán a la periodista.

Todos los que participaron en la organización y ejecución de la golpiza están libres.

La agresividad del hombre quedó plasmada en imágenes de video por los reporteros que en ningún momento dejaron de grabar a pesar de las constantes amenazas

Con información de La Jornada