COEPRIS con supervisiones permanentes al agua para consumo humano

COEPRIS con supervisiones permanentes al agua para consumo humano

• Se recomienda no consumir agua de pipas de dudosa calidad

Emsavalles| | Sábado, 23 de Marzo de 2019| 13:00

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En los primeros meses del año, la Comisión Estatal para la Protección Contra Riesgos Sanitarios (COEPRIS), realiza revisiones a pipas para el abasto de agua potable para así garantizar que el abasto que consumen los usuarios, sea de calidad y no sea de riesgo, por lo que a la par de la supervisión de las condiciones del tanque, se realizan muestreos del agua que transportan.

Estas labores se realizan en cumplimiento a la NOM 230-SSA1-2002 y la NOM 127-SSA1-1994 donde se establecen los requisitos sanitarios que deben cumplir los sistemas de abastecimiento público y privado durante el manejo del agua, así como los límites permisibles de calidad.

En las supervisiones se revisa la calidad del agua, adecuada cloración, condición del tanque el cual no debe presentar corrosión, encontrarse limpio y contar con la leyenda "Agua Potable"; el vehículo debe ser exclusivo para el transporte de agua potable".

Además, las pipas deben presentar la manguera de distribución en buenas condiciones y sin fugas, permanecer cerradas hasta se vacíen, concentrado de cloro residual de 0.5 a 1.0 mg/l, sello hidráulico en el punto de extracción, mangueras y válvulas libres de contaminación, bitácora de servicios, no presentar fugas de agua y dar uso exclusivo para transportar agua para consumo humano.

La COEPRIS, recomienda a los usuarios de éste servicio, no consumir agua de pipas de dudosa calidad, así como agua de pipas para la construcción o agua para riego de jardines y asegurarse que los vehículos que surten de agua para consumo humano porten la leyenda "Agua Potable".

Estas supervisiones al abastecimiento de agua potable y purificada para consumo humano continúan de manera permanente debido a que al incrementarse las temperaturas en San Luis Potosí el consumo se incrementa, por lo tanto, la calidad del vital líquido debe ser siempre bajo las normas que exigen las autoridades sanitarias, para evitar afectar a la población.