Semana del 28 de Noviembre al 04 de Diciembre de 2014

Origen del Fango político

Origen del Fango político

Fernando Díaz de Leon C.

Cuando los potosinos observamos una guerra sucia, ruin y pusilánime como la que se ha desatado entre políticos, la primera pregunta que el ciudadano común se hace: “No es a quien afecta o perjudica”, “sino a quien directa o indirectamente beneficia”. La segunda interrogante es: “No es quien resulta afectado o favorecido”, sino “quien, aparte de ello quiere y desea aprovechar, lucrar u obtener una ganancia”

La absurda comparación entre el Alcalde Mario García Valdez con respecto de Fernando Pérez Espinoza y de José Ramón Martel, tiene una lógica estúpida y perversa: “Confundir, pegar y esconder el rostro”. Dudo que sea el Alcalde el artífice de esta intriga, pero de algunos de sus colaboradores oficiosos externos o internos no. Afortunadamente el pueblo potosino es paciente. La gente solo observa, escucha y calla, pero un pelo de tonta no lo tiene.

Aquellos a los que se le está ocurriendo iniciar una guerra de lodo, lo único que provocarán es que el pueblo potosino amanezca un día bien muerto, pero de risa. ¿A quiénes o a quien se le ocurre colocar al presidente municipal capitalino como al más picudo de los tres aspirantes mencionados, cuando saben perfectamente que es la figura más cuestionada por el mayor número de negativos que arrojan y arrastra en las encuestas hechas a población abierta?

Obvio que al Alcalde no, porque sería tanto como inmolarse o asirse el mismo de sus arrestos. En todo caso,- en lugar de intentar culpar al Alcalde García Valdez, porque no suponer que esa perversidad tiene y viene de otro interés que busca pegarle a los tres,- donde todo sea de paso, había que involucrar su figura y virtudes para atizarle principalmente solo a dos y de pasito a él, por aquello que se quiera acelerar y hasta creer que él podría ser.

Una cosa es cierta, quienes pretenden denostar al empresario y diputado Fernando Pérez Espinoza, al Alcalde Mario García, al ex diputado federal José Ramón Martel,- el cual por cierto es de mi edad y todavía le falta un tramo para los 60; no son panistas, petistas, perredistas, panalistas, conciencistas o verdecillos,- de ninguna manera. Podrían ser totalmente priistas los autores intelectuales del intento de desprestigio, y, son responsables algunos que otros porrillos bien adoctrinados y pagados quienes lo están materializando.

El caso específico del presidente municipal de Soledad de Graciano Sánchez, Ricardo Gallardo Cardona y de su padre, es harina de otro costal y el enjuague es otro. Tampoco son panistas, petistas, morenistas, perredistas o convergentes los que buscan desprestigiarlos. En esencia pura podrían ser priistas los que estarían al servicio de quien ya se ve en la candidatura del PRI al gobierno del estado, pero que siente, cólicos, ñañaras y urticaria porque en las encuestas hechas es el que más número de negativos tiene, y porque en los positivos están muy por encima de él, así de fácil.

En varias ocasiones, he sostenido que los Gallardos se han convertido en un fenómeno político. Hoy se confirma, pues el joven presidente municipal y su padre no solo tienen al PRI y al PAN con el Jesús en la boca, sino que además han demostrado ser mandatarios chambeadores, comprometidos con la gente, creativos e imaginativos, resueltos y echados para adelante. No son de los que mienten o roban,- y por eso el tamaño del miedo.

Esa foto que desde hace mucho tiempo circuló en las redes sociales, donde Ricardo Gallardo Cardona porta un rifle propiedad de la policía, fue tomada en un evento oficial donde se entregaron patrullas y equipo a las corporaciones soledense, lo demás son meras ganas de joder y pretender mostrar a la opinión pública una imagen de él diferente, cosa que difícilmente lograrán.

En ese juego de perversión política, tampoco escapó el diputado federal Xavier Azuara. Pero curiosamente en su caso,- no son panistas quienes pretenden denostarlo. Volvemos otra vez, todo apunta a que podrían ser priistas que caminan por la libre o corren como chivas locas, y que, en su intento desesperado buscan por cualquier vía quitar piedras del camino tratando de aniquilar al contrario. Ya lo veremos.

Ojalá que las autoridades electorales pongan atención en esto en lugar de andarse con jaladas y gastar tanto dinero en el monitoreo satelital para detectar espectaculares, presunciones o simulaciones de actos anticipados de campaña.
Hasta pronto.