Semana del 09 de Octubre al 15 de Octubre de 2020

La pandemia en corto

La pandemia en corto

Fernando Garduza

Ricardo Pedroza es un cineasta instalado en San Luis Potosí que sufre un cuadro de ansiedad crónica, lo cual, le permitió experimentar al máximo las sensaciones que está dejando el encierro por la pandemia causada por el Covid-19 a mucha gente en todo el mundo.

Durante la cuarentena, y junto a un equipo de trabajo reducido, Ricardo Pedroza filmó "Sueño Profundo", un cortometraje que desarrolla una historia enmarcada en el encierro. "El cortometraje trata principalmente de dos temas, los problemas de ansiedad y la soledad que siente uno en el encierro. Habla acerca de un chico que se llama Omar, que se da cuenta que su vida pareciera ser lo mismo todos los días y comienza a quejarse y a sentirse pesado, pesimista contra la vida, hasta que un día conoce a una chica, de algún lugar llegó, y esta chica le empieza a hacer notar los pequeños detalles que son los que hacen que esto valga la pena", explicó el cineasta al respecto de "Sueño Profundo".

Explicó además que, por las complicaciones de este momento histórico en todo el mundo, tuvo que trabajar con un equipo reducido. En preproducción, fueron dos personas, y en la producción y todo lo que involucra, acabaron siendo solamente ocho personas cuando este tipo de producciones requieren hasta 20.

"Queda para la historia marcado como una experiencia única, aunque el corto sea bueno o malo, que esperamos que sea bueno, esta cuestión de trabajar con mascarillas, ser más minuciosos en el tacto, en la cercanía con los otros, le dio un sabor que no habíamos probado antes, porque por lo general en una filmación está muy cerca el fotógrafo del director, o te acercas a los actores a dar una indicación, o estás jugueteando de repente el algún corte, y acá se podía pero tratamos, en la mayoría de los casos, ser lo más responsables posible".

Ricardo Pedroza aceptó que grabar un corto en la pandemia no era lo más indicado, sin embargo, tenía la necesidad de contar la historia y sacar adelante el proyecto, y aunque las autoridades no tienen al cine en la lista de actividades esenciales, desarrollaron el corto con todas las medidas sanitarias posibles.

Sobre cómo ha afectado la pandemia al mundo del cine, explicó que, en todo el mundo, producciones chicas y grandes, tuvieron que ser detenidas e incluso aún se está re pensando la manera de cómo sacarlas adelante. Hay producciones que, con trajes, mascarillas, con distanciamiento, con reducción de los grupos de trabajo, aislando a los actores lo más posible, están sacando adelante las producciones.

"Es muy difícil entender que se tenga que hacer cine cuando el mundo casi se nos estaba viniendo encima, pero la industria no se puede detener por tanto tiempo y tiene que buscar la manera para que la gente siga comiendo. En nuestro caso fue un corto chiquito con un presupuesto chiquito, entre cuates muy provisionalmente, pero hay otros casos de gente que vive de esto, en México, en otros países, y no se pueden dar el lujo de detenerse tanto tiempo".

Sobre la idea del corto, detalló que surgió a partir del encierro, y comenzó a desarrollarse desde marzo. El cineasta afirmó que esta, es una historia que de alguna manera resonó en cada uno de los participantes de diferentes maneras, y que al final a todos los tocó.

Agregó que no fue que tuviera la necesidad de hacer el corto durante la pandemia, sino que al estar justamente en el encierro, experimentando lo que significa una cuarentena obligada, surgió la idea y junto a un grupo de amigos la desarrolló.

"Al estar en la pandemia, no digamos que sufriendo porque tampoco hubo sufrimiento, pero sí al estar experimentando esta clase de sensaciones, fue la necesidad creativa y de expresión, era necesario cuando ya todos los días es lo mismo, como una catarsis, y sacarlo de alguna manera, en este caso, a través de este medio que es el cine, y fue hasta cierto punto terapéutico".

Ricardo Pedroza reconoció que este ha sido un periodo creativo para muchos artistas, sin embargo, no ha sido necesariamente el mejor, pues en su caso, él hubiera preferido no tener ese tiempo de creatividad a cambio de que no hubiera pandemia.

"Es cierto que tanta pausa, tanto silencio hasta cierto punto, en mi caso la sensación de soledad y la ansiedad, te obligan; yo no me considero un súper artista, la verdad, supongo que otros artistas se sienten hasta cierto punto obligados, ya como de memoria muscular, a hacer algo con esto que está sucediendo, el que pudo sacar alguna creación de esto ganó un poco más de lo que perdió".

El cineasta, que ha participado en otros diez cortos, tiene en mente realizar un largo metraje pues después de haber hecho varios cortos existe la inquietud de hacer algo más: "el pasado cortometraje y este empezó a cruzar mi mente, no tenemos aún la historia indicada, pero mientras el mundo esté así y no lo permita, no es momento de hacerlo seguiremos haciendo cortometrajes, pero ya en el horizonte podemos ver intentar hacer un largometraje".

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