Semana del 22 de Abril al 28 de Abril de 2022

Feminicidios en SLP; ¿Quién lleva la cuenta... y por qué es importante contarlos?

Feminicidios en SLP; ¿Quién lleva la cuenta... y por qué es importante contarlos?

María José Puente Zavala

El pasado 13 de abril, el fiscal general del estado José Luis Ruiz Contreras, aseguró que la dependencia investiga únicamente 2 casos por presunto feminicidio cometidos en lo que va de 2022 en San Luis Potosí.

El funcionario estatal detalló que se clasificó como feminicidio el caso de Renata, una niña de tres años que fue cruelmente asesinada en Cerritos por la pareja sentimental de su madre el 26 de marzo; así como el de dos mujeres asesinadas, presuntamente por un joven de 16 años, el 7 de abril en un rancho ubicado en el municipio de Tamuín.

Por el contrario, Ruiz Contreras dejó fuera, al menos, dos casos que cumplen con las características para ser clasificados como feminicidios, que ocurrieron en 2022, y que, de acuerdo con la versión oficial, podrían no estar siendo considerados en las estadísticas de incidencia en este tipo de delito.

Uno es el caso de la joven Nayeli Alfaro Silva, desaparecida desde el 24 de marzo, cuyos restos fueron presuntamente hallados el 1º de abril y en el que su pareja sentimental es el primer sospechoso de haber cometido el crimen; y otro es el de una mujer que fue encontrada muerta, con un disparo de arma de fuego que le habría propinado su pareja, en un domicilio en el municipio de Salinas, el 15 de febrero.

¿QUÉ CARACTERÍSTICAS TIENE UN FEMINICIDIO Y POR QUÉ ES IMPORTANTE IDENTIFICARLO Y DIFERENCIARLO DE UN HOMICIDIO?
De acuerdo con la Secretaría de Gobierno, un feminicidio representa la forma más extrema de violencia en razón de género contra las mujeres que tiene su origen "en la posición de subordinación, marginalidad y riesgo en el cual éstas se encuentran respecto de los hombres".

Incluso aunque después se clasifique como un homicidio, toda muerte violenta de una mujer debe comenzar a investigarse bajo el protocolo de feminicidio; sin embargo, la propia Segob reconoce que, en México, "comúnmente los homicidios que se cometen contra las mujeres no son investigados tomando en consideración que podrían tratarse de feminicidios.

Por esta razón, el Modelo de protocolo latinoamericano de investigación de las muertes violentas de mujeres por razones de género recomienda que todas las muertes violentas de mujeres que en principio parecerían haber sido causadas por motivos criminales, suicidio y accidentes, deben analizarse con perspectiva de género, para poder determinar si hubo o no razones de género en la causa de la muerte y para poder confirmar o descartar el motivo de ésta".

Al hacerlo, de acuerdo con el Inmujeres, las instituciones encargadas de impartir justicia impiden que se perpetúen otras expresiones de violencia contra mujeres como la violencia doméstica, el acoso y la discriminación y, además, se avanza en la búsqueda de un sistema penal que garantice los derechos de las mujeres y niñas en México.

De acuerdo con el Código Penal Federal, que reconoce el feminicidio en el artículo 325, hay 7 circunstancias clave que determinan si la muerte violenta de una mujer ocurrió por razones de género:

• La victima presente signos de violencia sexual de cualquier tipo.
• A la víctima se le hayan infligido lesiones o mutilaciones infamantes o degradantes, previas o posteriores a la privación de la vida o actos de necrofilia.
• Existan antecedentes o datos de cualquier tipo de violencia en el ámbito familiar, laboral o escolar, del sujeto activo en contra de la víctima.
• Haya existido entre el activo y la victima una relación sentimental, afectiva o de confianza.
• Existan datos que establezcan que hubo amenazas relacionadas con el hecho delictuoso, acoso o lesiones del sujeto activo en contra de la víctima.
• La victima haya sido incomunicada, cualquiera que sea el tiempo previo a la privación de la vida.
• El cuerpo de la víctima sea expuesto o exhibido en un lugar público.

San Luis Potosí reconoce el feminicidio en el artículo 135 del Código Penal estatal y es una de las 12 entidades donde las 7 circunstancias clave para identificarlo deberían ser tomadas en cuenta.

NAYELI; INCERTIDUMBRE Y ESPERANZA
"En el corazón siento yo todavía esa luz de que mi hija está viva", declaró la señora Lorena Silva el pasado 9 de abril, 24 horas después de que la Fiscalía General del Estado finalmente hiciera públicos los resultados del examen de ADN que se practicó al cadáver encontrado el 1 de abril en el ejido Santa Rita y que, asegura, corresponde a Nayeli Alfaro Silva, desaparecida desde el 24 de marzo en San Luis Potosí.

El 25 de marzo, Uriel N, pareja sentimental de Nayeli, publicó un mensaje en las redes sociales de ella, en el que aseguró que un día antes la había dejado en un punto cercano al gimnasio al que acudía y que desde entonces ninguna noticia había tenido de ella. Posteriormente, el hombre acudió a tramitar la ficha de búsqueda y después también desapareció.

Siete días más tarde, tras algunas diligencias entre las que se incluye un cateo en el domicilio que ambos compartían, así como la revisión de videos de vigilancia en propiedades colindantes, la FGE confirmó que había localizado un cadáver en un predio baldío ubicado en el ejido Santa Rita, al sur de la ciudad, y, aunque todavía no tenían el cotejo de la información genética, el fiscal aventuró que se trataba de la chica de 25 años.

Horas más tarde, al acudir a realizar el reconocimiento del cuerpo, Lorena Silva expresó su inconformidad, pues previamente se le había indicado que el cadáver tenía cabello, así como tejidos que permitirían facilitar el reconocimiento; sin embargo, al arribar al Servicio Médico Legista, la madre de la víctima encontró únicamente huesos.

"Yo no vi absolutamente ni un solo pedacito de carne. También dieron a conocer que el cadáver tenía un tatuaje, ¿cómo si estoy viendo un esqueleto? También me dijeron que la reconocería por el cabello y el cráneo, pero este cuerpo no tiene cabello", declaró.

Ante la incertidumbre de las respuestas provistas por la autoridad, la familia informó que realizarán una nueva prueba de ADN, esta vez a cargo de un laboratorio privado, misma que podría tomar hasta tres semanas en arrojar resultados y, mientras tanto, los restos permanecerán bajo resguardo de la Fiscalía.

Hasta el pasado 14 de abril, 21 días después de reportarla como desaparecida, Uriel N fue detenido en el Barrio de San Sebastián, en la capital del estado, por la Policía de Investigación; y, hasta el cierre de esta edición, todavía no se llevaba a cabo la audiencia de vinculación a proceso, donde se establecerá si será imputado, o no, por el delito de feminicidio.

Sin embargo, en su declaración del 13 de abril, el fiscal potosino adelantó que, aunque se trata de un crimen que cumple con, al menos, cinco circunstancias clave para clasificarlo como feminicidio, en realidad está siendo investigado como una "desaparición forzada cometida por particulares".

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