Semana del 21 de Octubre al 27 de Octubre de 2022

Artillería mediática

Artillería mediática

Juan Veledíaz

En los primeros días de noviembre del 2002 el general Francisco Quirós Hermosillo, uno de los referentes de la Guerra Sucia en los años setenta, enfrentaba el Consejo de Guerra que lo juzgaba por posibles vínculos con el narcotráfico. En una de las audiencias le tocó turno para defenderse. Esa ocasión se paró frente al estrado donde estaban los cinco generales que integraban el tribunal, erguido a voz en cuello sin moverse de su posición, exclamó:

-En estos últimos días y durante todo el proceso penal, he sido víctima de un intenso fuego de artillería mediática. Me han acusado de todo, usando testimonios sin sustento para las notas en la prensa- dijo quien había sido uno de los mandos de la Brigada Blanca, el cuerpo paramilitar creado en la segunda mitad de los años setenta para enfrentar la guerrilla.

Formado como oficial de artillería en el Colegio Militar, Quirós hacía la analogía del impacto que tuvo en la opinión pública el que se difundieran detalles del rol que tuvo en la política de desapariciones forzadas de disidentes en aquella época. Veía las publicaciones como un obús que hace blanco en su objetivo, como las que citaban su rol de interlocutor con los jefes del tráfico de drogas con quienes departía para obtener información sobre los clanes mafiosos.

Tuvieron que pasar casi dos décadas para que otra vez la artillería mediática sacudiera ahora con más fuerza el establishment castrense mexicano. Pocas cosas molestan e incomodan tanto a los altos mandos que ver publicaciones donde queda evidenciado el mito de la pulcritud de la imagen del Ejército. Les cuesta reconocer que los cuestionamientos son por sus omisiones y fallas en cómo se conduce la institución.

Porque cómo entender esa falta de control y ausencia de medidas de contrainteligencia para permitir que armamento militar sea vendido a grupos de la delincuencia organizada, como se publicó hace unos días, donde están involucrados militares de un regimiento en el Estado de México y del Campo Militar 1. O cómo explicar la conducta de dos ingenieros militares, un coronel y un capitán, con depósitos millonarios producto de las obras bajo su cargo usando empresas fantasma.

No son los mejores días del sexenio para el general Luis Crescencio Sandoval González. Varios especialistas cuestionaron cómo era posible que el secretario de la Defensa Nacional tuviera esas fallas en el manejo de información sensible reenviada a su correo personal, detalle publicado por una columnista basada en los documentos hackeados por el colectivo Guacamaya.

Les incomoda no solo la evidencia del falso discurso de austeridad, aplicada de forma facciosa, cuando la Sedena gasta medio millón de pesos en 47 abrigos confeccionados para igual número de generales de división, la cúpula militar, cuando cada prenda vale 10 veces más que el uniforme de la tropa, como publicó El Sol de México. Les molesta que se haga público cómo manipulan la evidencia sobre los registros del número muertos en choques con la delincuencia, o que se conozcan detalles de las intenciones por criminalizar a quien "posee, manipule o conozca" información de seguridad nacional, como difundió Animal Político. En 2002 Quirós Hermosillo decía que había "artillería de ablandamiento". ¿Será este el caso?

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