Opinión
Debemos poner nuestros ojos en Jesús
Por Héctor de Luna Espinosa
En fechas recientes tuvimos la oportunidad de ver compitiendo entre sí a diversas personalidades de todo el mundo que en la sede de Río de Janeiro estuvieron tratando y luchando por llevarse el oro a sus países, en estas olimpiadas los deportistas se enfocaban en las medallas, si no lo hubieran hecho nunca las hubieran obtenido, ellos querían ganar el oro, quiero leerles lo que dice Hebreos 12, los primeros 2 Versículos nos mencionan; "Por tanto nosotros también tenemos en derredor nuestra tan grande nube de testigos despojémonos de todo peso y del pecado que nos asedia y pongámonos con paciencia la carrera que tenemos por delante", es decir lo que nos está diciendo aquí es que entre tanta gente que está a nuestro alrededor debemos despojarnos de tanto peso para poder correr correctamente la carrera, tenemos que ser pacientes como en una carrera de fondo para poder llegar a la meta, la carrera que tenemos por delante debemos de proseguir y no darnos por vencidos y luego el Versículo 2 nos dice: "Puestos los ojos en Jesús el autor y consumador de la fe el cual por el gozo puesto delante de él sufrió al cruz, menospreciando lo propio y se puso a la diestra de Dios, así como los deportistas tenían puesta la mirada en la meta o en un premio en el lugar que iban a obtener, nosotros debemos de poner nuestros ojos en esta carrera que estamos en la vida, corriendo, debemos poner nuestros ojos en Jesús.
Si nos enfocamos en alguien que no es Jesús nos vamos a decepcionar, pero Jesús nunca nos decepcionará, es importante mantener nuestro enfoque en Jesús, si nos enfocamos en las circunstancias que nos reordena nos vamos a desanimar y posiblemente vamos a empezar a dudar, nuestra fe va a debilitarse, las circunstancias naturales pueden hacerte dudar y por eso debemos poner toda nuestra miradas y nuestra atención en Jesús, ahora ¿Cómo? Pues leyendo su palabra, manteniéndola en nuestro corazón, poniéndola en nuestra mente o nuestra boca y siempre que esté frente a nuestros ojos, el mantener nuestra mirada en la palabra, esto nos mantendrá nuestros ojos en Jesús, el actor y consumador de la fe.
No es lo mismo arrancar que terminar, el premio en lo natural no es para el que arranque, más rápido sino para el que termine más rápido, algunos empiezan lento pero terminan rápido, como acabas es lo que importa, así es que mantente firme, fijo, constante, con paciencia, despojándote de todo lo que te estorba para poder llegar a esa meta que es Jesús.
Muchos en vez de mirar a la meta se distraen y fallan en llegar a la meta, quiero platicarles también el caso de Pedro, Pedro caminó también sobre el agua con su mirada puesta en Jesús, pero cuando miro las olas a su alrededor se empezó a hundir pero al final le ¿volvió a poner su mirada en Jesús y Jesús lo rescató de hundirse en el agua y pudo caminar junto con Jesús.
Dice Mateo 14: "En la cuarta vigilia de la noche, Jesús vino caminando sobre el mar y los discípulos viéndole andar sobre el mar se turbaron y diciendo '¡Un fantasma!' y dieron voces de miedo pero en seguida Jesús les habló diciendo: 'Tened ánimo, yo soy, no temáis', entonces le respondió Pedro y dijo: 'Señor, si eres tú manda a que yo vaya a ti sobre las aguas' y él le dijo ; 'ven' y descendiendo Pedro sobre la baraca andando sobre las aguas para ir a Jesús pero al ver el fuerte viento, tuvo miedo y comenzando a hundirse dio voces diciendo: '¡Señor sálvame! Y al momento Jesús extendió la mano, extendiendo la mano asió de él y le dijo: 'Hombre de poca fé, ¿Por qué dudaste?'
Quiero invitarte a que no te fijes en las circunstancias que están a tu alrededor porque estas pueden hacerte hundir, mejor pon tu mirada en Jesús, ve lo que su palabra dice, en este caso Pedro le dijo; "Ven a mí" y hoy Jesús te está diciendo "Ven a mí", él te está diciendo: "Tened ánimo yo soy no temáis", así que no hay necesidad de porqué hundirte, quita tu mirada de las circunstancia que te están rodeando, que te están hundiendo y así como el deportista lucha y tiene que hacer su esfuerzo y seguir adelante y seguir franqueando obstáculos para llegar a la meta y obtener el premio que esta al final así yo te invito que pongas tu mirada en Jesús el autor y consumador de la fe su palabra nos da grandes promesas él te dice en cristo todo lo puedes en Cristo que te fortalece él nos dice el filipenses 4:19 mi Dios fue su pilar todo lo que os falta conforme a su riquezas en gloria en cristo Jesús.
Él te dice en jeremías 29:11 porque yo se los pensamientos que yo tengo acerca de vosotros dice Jehová pensamientos de paz y no de mal para dar os el fin que esperáis así es que no importa las circunstancias pon tu mirada en él y en lo que él te dice y entonces veras la victoria.
Cuando nos vemos a nosotros mismos lo único que vemos son nuestras debilidades nuestras fallas pasadas pero si ponemos nuestra mirada en Jesús vamos a ver perdón, fe, fortaleza, animo, aliento para seguir la carrera, si has comenzado la carrera si no lo has hecho es tiempo de correr y si ya has comenzado sigue corriendo pon tu mirada en la meta que es Jesús y no dejes que nada te distraiga mantén el enfoque y gana el premio y que podamos terminar la carrera diciendo como Pablo he peleado la buena batalla e acabado la carrera he guardado la fe.
Termino con una oración Señor te damos gracias porque a pesar de las dificultades de la vida, a pesar de las circunstancias tan difíciles, las tormentas y los obstáculos que vienen en nuestro camino, si tú vas con nosotros podemos seguir adelante queremos poner nuestra mirada no en las cosas pasajeras si no en ti que eres eterno para que tú nos lleves a un buen destino y podamos llegar a la meta.
Sabemos ser como tú dices en tu palabra como tú eres el camino de la verdad y la vida y nadie va al padre si no por ti, queremos que seas nuestro señor, nuestro guía, nuestro director, nuestro maestro que nos lleve al fin del termino queremos llegar a la meta queremos llegar al cielo y solo es a través de ti gracias Jesús por lo que haces.
Amigos de emsavalles que Dios los bendiga yo soy Héctor de luna y estoy para servirles.