Realiza Museo Federico Silva plática sobre oración plástica

Realiza Museo Federico Silva plática sobre oración plástica

EMSAVALLES Noticias| San Luis Potosí, S.L.P.| Miércoles, 19 de Septiembre de 2012| 17:41

En el marco de la exposición del escultor Mathias Goeritz, el Museo Federico Silva, realizó una conferencia con Alberto Rodríguez Preciado, quien habló sobre la oración plástica del mencionado escultor y arquitecto que dejó uno de los legados artísticos más importantes de la historia cultural del País.

La exposición de Mathias Goeritz será inaugurada el 21 de septiembre y forma parte de las actividades realizadas por el festejo del noveno aniversario de este recinto cultural.

Algunas de las obras más emblemáticas de Mathias Goeritz son: las Torres de Satélite, inauguradas en marzo de 1958 como emblema de la nueva Ciudad Satélite, paralelo a esta obra realiza las Torres de Temixco en el Estado de Morelos y los vitrales de la Capilla de San Lorenzo Mártir en la Ciudad de México.

En 1959 después de la muerte de su esposa Marianne Gast, comienza la serie de obras bidimensionales conocidas como Mensajes dorados, obra monocromática que incluye a la hoja de oro como material espiritual, Mathias Goeritz define esta obra de arte como una oración plástica. Esta serie culmina con la exposición del mismo nombre en la Galería Carstairs de Nueva York en 1962.

Los Mensajes dorados fueron los precursores de su colaboración con Luis Barragán en el proyecto del altar de la Capilla de las Capuchinas en la Ciudad de México en 1963. En 1964 realiza la escultura de la estrella de David, las torres y los vitrales de la sinagoga Maguen David, y en 1967 la Celosía del Hotel Camino Real y otra para unos laboratorios que hoy ocupa la Comisión de Derechos Humanos del D.F., y los vitrales para la nave principal de la Catedral Metropolitana, todas estas obras en la Ciudad de México.

También promovió la creación de la Ruta de la Amistad, un circuito escultórico urbano, en el Anillo Periférico de la Ciudad de México con motivo de las Juegos Olímpicos de 1968. Este proyecto incluyó el trabajo de más de una decena de escultores extranjeros que representaron a varios países.