Semana del 31 de Diciembre al 06 de Enero de 2022

¿Quiénes y cómo viven en las cárceles de SLP?

¿Quiénes y cómo viven en las cárceles de SLP?

María José Puente Zavala

A inicios de diciembre de 2021, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía publicó la Encuesta Nacional de Población Privada de la Libertad (ENPOL 2021) en México, donde, entre otras cosas, expone el perfil demográfico de quienes, en las 32 entidades de la República, ocupan las cárceles o centros penitenciarios.

Los datos para San Luis Potosí arrojan información interesante, sobre todo partiendo del hecho de que, entre las primeras acciones del actual gobierno estatal, han estado la liberación de algunos presos y la promesa de mejora en las instalaciones, al menos, del Centro de Reinserción social de La Pila.

De acuerdo con la ENPOL, en SLP hay 2698 personas privadas de la libertad, de las cuales 2577 son hombres (95.5%), y 121 son mujeres (4.5%). Además, estima el estudio que la mayoría se ubican entre los 18 y los 39 años de edad y que al menos de ellas nacieron en otros países. Se trata de 21 hombres y 4 mujeres.

¿Es diferente para los hombres que para las mujeres atravesar por el sistema penitenciario en San Luis Potosí?

Definitivamente. Los datos indican que 1337 de los presos y presas en San Luis Potosí estaban casados, al menos entre julio de 2020 y julio de 2021, tiempo en que se llevó a cabo la encuesta. 1280 son hombres y 57 son mujeres; y, en total, casados o no, 1728 reporta tener hijos menores de edad.

En el caso de los hombres, un 63,45% de la población recluida reporta tener hijos menores de edad, pero en el caso de las mujeres ese porcentaje se incrementa hasta el 77,9% y cabe mencionar que, en promedio, las personas privadas de la libertad en SLP, que tienen hijos, tienen dos.

El cuidado de los menores se termina asignando de manera diferente cuando se analiza el género de los padres. Por ejemplo, incluso a nivel nacional, cuando los hombres con hijos están en prisión, son sus parejas o las madres de sus hijos quienes se hacen cargo; pero cuando se trata de las mujeres privadas de la libertad, son más bien los abuelos quienes asumen el cuidado de sus nietos.

La educación es otro aspecto en el que salen a relucir las desigualdades entre mujeres y hombres, pues aunque es mayor el porcentaje de hombres que no saben leer ni escribir un recado, entre quienes han cursado al menos la educación básica (70% de la población recluida) destaca el porcentaje de hombres.

En general, vale la pena mencionar que en San Luis Potosí un 5,2% de la población privada de la libertad no sabe leer ni escribir al menos un recado, lo que supone un reto en términos del conocimiento que cada persona tiene sobre su propio proceso.

... y otro aspecto relevante es que la entidad es una de las 9 (junto con Coahuila, Colima, Guerrero, Morelos, Tlaxcala, Yucatán y Zacatecas) donde ninguna persona privada de la libertad ha conseguido obtener educación superior durante el período de reclusión; y también que, a nivel nacional, un mayor porcentaje de hombres privados de la libertad (18.4%) obtiene formación escolar durante su reclusión, en comparación con las mujeres (14,5%).

SALUD EN RECLUSIÓN; UN DERECHO INCUMPLIDO
LA ENPOL también arroja luz sobre el acceso que las personas privadas de la libertad tienen a los servicios de salud, incluso psicoemocional. Por ejemplo, muestra que al menos un 12,4% de las personas que están en reclusión legal en San Luis Potosí han pensado en suicidarse; y que, de ellos, el 40.4% de hecho lo ha intentado.

A nivel nacional, el porcentaje de quienes han considerado el suicidio en reclusión es del 11,8 pero al mirar de cerca en los datos correspondientes a la entidad potosina, estos arrojan que, mientras apenas el 11.5% de los presos varones han tenido pensamientos suicidas, el porcentaje se eleva el 30,6% cuando se trata de las mujeres.

Por otro lado, al menos al 30,8% de los presos en San Luis Potosí no se le practicó un examen médico a su llegada al centro penitenciario y esa desatención en cuanto al acceso a la salud por parte de la población privada de la libertad coloca al estado en la posición 14 entre los que más incumplen esa medida.

Además, a nivel nacional, solo al 40% de las mujeres en reclusión se les ha practicado un Papanicolaou; mientras que apenas a 30% se les ha practicado algún examen para detectar cáncer de mama.

Al respecto, San Luis ocupa el lugar 23 entre los estados que menos estudios de Papanicolaou han practicado a las internas, pues solo el 58.3% han recibido dicha atención; mientras que, en el caso de los estudios para detectar cáncer de mama, la entidad es la número 11 entre las que menos los proveen, con apenas un 22,5% de la población que lo ha recibido.

Finalmente, cabe mencionar que, a nivel nacional, el 94,7% de la población en reclusión reportó haber consumido sustancias psicotrópicas alguna vez en la vida; y que en SLP ese porcentaje asciende al 92,7%, siendo tabaco, bebidas alcohólicas y marihuana, las 3 sustancias que principalmente se consumen.

En contraparte, solo el 16,7% de las y los reclusos potosinos reporta que el centro penitenciario donde se encuentran les ha proporcionado algún tratamiento médico o psicológico para dejar de consumir dichas sustancias.

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