Semana del 20 de Noviembre al 26 de Noviembre 2015

El "Buen Fin": La emoción por el "Black Friday" mexicano

El "Buen Fin": La emoción por el "Black Friday" mexicano

Alfredo Lara Álvarez

El fin de semana pasado tuvimos el llamado BUEN FIN, que provocó que plazas comerciales, supermercados y los centros de muchas ciudades mexicanas se abarrotaran de consumidores esperanzados en encontrar buenas ofertas. Varias tendencias caracterizaron este fin de semana, que según la propaganda y la mercadotecnia, garantiza días donde se encuentran los precios más bajos durante el año.

Georgina Solís compró hace un mes una televisión plana que le costó 6,000 pesos a meses sin intereses, con la llegada del Buen Fin, ella decidió sondear el precio en que pudo haber comprado su televisión en caso de haberlo hecho hasta ahora.
"Hace cuatro semanas compré una televisión que me costó 6,000 pesos, pero ahora vine a ver en cuánto iba a estar y me encuentro con la sorpresa de que ese mismo aparato ahora cuesta 7,500 pesos y con el descuento me hubiera salido aproximadamente en el precio que la compré", declaró.

Réplica del viernes negro de Estados Unidos, empresas rematan sus productos almacenados y el porcentaje descontado, el gobierno lo cobra en impuestos a los mexicanos, pagándole los deducibles de dichos porcentajes, a los mismos empresarios, perdiendo solo el comprador; Se trata de un convenio entre el Gobierno Federal y la Iniciativa privada, mediante el cual se ofrecieron por todo el país, del 13 al 16 de noviembre, importantes descuentos y promociones en productos y servicios; en él, participan cámaras empresariales tales como ANTAD y CONCANACO-SERVYTUR, que agrupan a las más importantes tiendas de autoservicio, departamentales, especializadas y de conveniencia, como Liverpool, Sears, Palacio de Hierro, Walmart, Soriana, Comercial Mexicana y Office Depot, entre otras.

También participa la Asociación de Bancos de México, integrada por los grupos financieros (Banamex, BBVA Bancomer, Santander, Banorte, HSBC, entre otros), que operan en el país.

El objetivo del Buen Fin es impulsar el mercado interno y por ello, el Gobierno Federal adelanta a sus empleados el 40% de su aguinaldo correspondiente al año en curso, las dependencias y entidades gubernamentales, deberán también afiliar a sus empleados al Fondo Nacional para el Consumo de los Trabajadores (INFONACOT), para que "puedan aprovechar su crédito FONACOT en 30,000 establecimientos registrados con este fondo".

Sin duda alguna, hubo recurrentes quejas de ciudadanos que se sentían agraviados con la publicidad engañosa, que por la falta de información completa o con anuncios de grandes ofertas que sólo se ofrecían en muy pocos productos, se vieron sorprendidos en el momento de pagar, aunado a que por parte de los comerciantes, señalaron que los consumidores solo miraban, preguntaban, pero no compraban.

Testimonios

"Fue un buen intento de las autoridades y los comercios, pero está lejos del Viernes Negro que celebran en Estados Unidos. Allá, hay tiendas con descuentos permanentes de 50% y en el Viernes Negro le agregan descuentos de hasta 70 por ciento. Eso sí sirve. Es necesario que eso se incentive en México".. Rosario Ruiz, empleada federal de 45 años

"La verdad es que vine por mi despensa para aprovechar los descuentos, pero no veo que en el ticket se reflejen las baratas que anunciaron. Compré lo mismo que el mes pasado y pagué prácticamente lo mismo". Rosa Amalia, ama de casa de 47 años

"Compré unos zapatos y tenis para mi familia y me fue muy bien, porque de una cuenta de 4,500 pesos, me regresaron 20% en un monedero y con eso adquirimos unos videos que querían los niños".Felipe Ángel, empleado general de 45 años

MITOS Y REALIDADES

1.- Comprar barato no es ahorrar. El ahorro es única y exclusivamente lo que separamos de nuestros ingresos y dejamos de gastar. Hay una tendencia a pensar que comprar barato siempre es bueno para las finanzas personales y esto sería cierto siempre y cuando el artículo o servicio fuese algo que ya se pensaba adquirir y además el dinero remanente fuera destinado a un depósito bancario o instrumento financiero.

Regularmente, esta excusa lleva al consumismo y lejos de ahorrar se gasta en mayor medida. Incluso he escuchado aseveraciones como "no lo necesito, pero estaba muy barato, ¿cómo iba a dejar de comprarlo?".

2.- Adquirir un bien de consumo duradero no es una inversión. Una inversión es cuando el destino del recurso tiene como objetivo el obtener una rentabilidad. Por ejemplo; cuando se compra un auto, existe un valor de rescate, pero no hay una ganancia. Al contrario, siempre se presenta una pérdida significativa.

3.- Comprar a meses sin intereses no tiene costo cero. Aun cuando las tiendas tengan anunciada una promoción sin un cargo por financiamiento, habría de revisarse el nivel de precios, pues podrían inflarlos para añadir un interés implícito. Una solución es comparar en varios lugares.

4.- Cuidado con los "Pagos cómodos". La publicidad regularmente presenta esquemas en donde destacan el monto a pagar semanal o mensual y distraen al comprador del costo real de la deuda adquirida. Bajo este tipo de situaciones se podrían estar erogando intereses desmedidos que pueden llegar hasta el 100 por ciento. Se sugiere tener siempre en cuenta el Costo Anual Total (CAT) que deben publicar quienes hacen promociones.

5.- Comprar no es aprovechar el aguinaldo. La temporada navideña entraña la tendencia a gastar en cosas que luego se arrepiente de haber adquirido o regalado. Hay muchos casos en donde incluso se destina por arriba del monto de la gratificación que proporciona la empresa.

6.- No es forzoso comprar algo en el buen fin. Resulta sumamente peligroso para el bolsillo el decir "voy a ir de compras para ver que aprovecho", porque se está actuando sin ningún propósito concreto y existe un alto riesgo de llegar a casa con algo que ni siquiera es necesario tener.

e-mail. alfredo.lara.alvarez@gmail.com