Semana del 12 de Junio al 18 de Junio de 2020

La "nueva anormalidad"

La "nueva anormalidad"

Mariel Sánchez

Sorprende a propios y extraños que en el contexto que se vive por la pandemia del Covid-19, la industria de la construcción, minería y el armado de vehículos sean consideradas actividades esenciales.

De acuerdo a la opinión de Juan Felipe Cisneros Sánchez, integrante del Observatorio Nacional Indígena, activar estos tres sectores, que sin duda tienen un importante peso en la estructura y la dinámica económica del país, también significa activar de facto, buena parte de la economía; aunque considera primordial, que la pandemia y la prudencia deberían acotar esta apertura, pues pareciera que la tónica es apresurarse.

Cisneros Sánchez explicó que estas tres industrias, son consideradas las más dinámicas, ello, por sus procesos de producción, distribución, mercado y finanzas, que requieren de componentes y estructuras operativas y administrativas de otras empresas, es decir, son propulsoras de la actividad económica.

"El reabrirlas supone reabrir la actividad económica en gran calado, pero ¿por qué en medio de esta pandemia?, ¿por qué si la pandemia se ha expresado de manera diferente se decide arrancar los motores, sin calentarse paulatinamente?", cuestiona.

Al respecto el miembro del Observatorio Nacional Indígena, al realizar un analices, recordó el pasado inmediato.

"Desde mediados de abril del presente año el gobierno de Donald Trump, presidente de los Estados Unidos de América, emprendió una campaña para persuadir a México para que reabra muchas fábricas debido a la integración de éstas a la cadena de suministro de la zona de libre comercio de América del Norte".

En este tenor, manifestó que el embajador de EUA en México Christopher Landau, insistió por diversas vías, sumando la presión de cientos de empresas estadounidenses, pero también del Departamento de Defensa de EUA, invitando a México a que reabra las plantas que fabrican piezas para sus contratistas, internamente, también el gobierno mexicano ha recibido presiones de los grupos empresariales de diverso tipo.

"Resulta obvio que en las decisiones de la denominada "nueva normalidad" del Ejecutivo Federal, se está priorizando la explotación de minerales, la fabricación de componentes cruciales para EUA que se hacen en México y son exportados al vecino del norte, así como no parar los megaproyectos constructivos que están comprometidos con importantes intereses nacionales e internacionales, como el Tren Maya o el transístmico que a su vez son proyectos bandera de la 4T", refiere el activista indígena.

Sobre ello, opinó que México pareciera estar contra la pared, pues da la impresión que en la balanza, por un lado están los riesgos que impone abrir las industrias dinámicas en el pleno de la pandemia del COVID19 y por otro, los costos económicos y políticos que resultan al mantener las empresas cerradas "las fricciones que esto genera con el capital nacional o foráneo, el gobierno de EUA o el de China rebasan al gobierno mexicano", asegura.

Dijo que, con ello parece delicado que bajo la cobertura de la pandemia, se trate de imponer a México otra realidad con una falsa 'nueva normalidad' por parte del gobierno, el capital nacional y el foráneo; al empeñarse a toda costa, en desarrollar los megaproyectos mineros, industriales, inmobiliarios, turísticos y agropecuarios intensivos por encima del bien común.

"Pues resulta evidente que las decisiones que se toman en este momento por parte del Gobierno Mexicano, están determinadas, no por el bien común, sino por la presión los compromisos que tiene el Gobierno con el capital nacional y foráneo".

Es comprensible que se tenga que buscar a la brevedad posible la reactivación económica ¿pero a costa de qué?, se pregunta, por lo que señala que la pandemia vino a mostrar las vulnerabilidades y poca capacidad institucional para enfrentarla.

"Pero también nuestras vulnerabilidades económicas, políticas y sociales ante esta situación crítica, tenemos la opción de continuar con el mismo modelo de desarrollo o atrevernos a cambiar paradigmas en la distribución de la riqueza y a intentar la construcción de una visión geoestratégica de nuestro territorio nacional que nos permita salir fortalecidos y no saqueados", sostuvo.

Sin embargo, Cisneros Sánchez argumentó que lamentablemente la sociedad mexicana está más entretenida en confrontarse que apostar a un nuevo acuerdo social que tanto reclama el presente y el futuro de México.

"Un referente ineludible para definir una mejor estrategia para intentar volver a la normalidad, es China, más aún cuando ahí se originó esta pandemia global, el Gobierno mexicano tiene que observar cada una de las acciones que integran la estrategia china e incluso identificar los errores.

Mencionó también que China ha intentado volver a la normalidad, tras haber acabado con los casos locales, controlando la pandemia en sus provincias y eso no ha sido garantía para evitar un nuevo repunte de infecciones, que ahora mismo les está obligando a cerrar ciudades y volver a aislar a millones de personas, dado el resurgimiento de contagios en el noreste de ese país.

"En el caso de México puede ser peligrosa la reapertura, si no se mira el presente con una perspectiva de futuro, si no se mira el territorio nacional con visión estratégica y en ello debemos recordar el sabio refrán popular que dice 'no por mucho madrugar amanece más temprano', pues las oleadas y rebrotes vendrán y eso es un hecho", finalizó Juan Felipe Cisneros Sánchez.

facebook. emsavalles Noticias Publicidad
twitter. @emsavalles
sitio web. emsavalles.com
e-mail. emsavalles@hotmail.com