Semana del 18 de Abril al 24 de Abril de 2014

Vienes a nosotros

Vienes a nosotros

Rodolfo del Ángel del Ángel

Eres la blancura de Dios, y vienes a la negrura de nuestro pecado y miseria.

Eres vida plena y desciendes a nuestra muerte.

Eres amor infinito y te manifiestas en medio de nuestros odios e indiferencias.

Eres el silencio de Dios que escucha, aguarda y contempla y vienes al ruido y al trajín de nuestra existencia aturdida que no sabe escuchar, ni contemplar.

Eres paz sin término, comunión real, perfecta armonía y vienes a nuestras guerras, odios inhumanos, murallas elevadas que separan, egoísmos que dividen.

Eres generosidad sin límite, dádiva amorosa, gracia inesperada, y así te das a nosotros, aunque nosotros no sabemos dar; retenemos, no compartimos, demandamos, no pedimos.

Eres salvación y perdón, divinidad hecha misteriosamente carne, humanidad perfecta que desciende al fango de nuestra miseria y nuestra carne enferma ¡Que humillación la tuya! ¡Que indignidad la nuestra!

Eres la espera paciente de Dios que aguarda a que nos volvamos a la vida; nosotros no sabemos esperar, somos impacientes, exigentes; no queremos la vida que nos das, insistimos en nuestro caminar errado, y tú. . .sigues aguardando.

Eres búsqueda incesante, vienes como el Buen Pastor a buscar a la oveja errada, pérdida, no renuncias en tu afán. Nosotros dejamos de buscar, de intentar, no importa quien se pierda, ¡tampoco queremos ser encontrados!

Eres la esperanza no esperada, el amor no amado, la salvación no deseada, la santidad manchada por nuestro pecado, y así vienes a nosotros para ser luz de nuestra ceguera, camino a nuestro andar, destino a nuestra vida sin rumbo. Eres la paz no conocida, pero anhelada en cada corazón, porque nuestro corazón te necesita, aunque no sepamos cómo, ni porqué.

Gracias por no dejar de amarnos y buscarnos. Sólo tú eres nuestro verdadero bien, nuestra paz y salvación. Sólo tú eres verdadera alegría, seguridad perdón.

Gracias, por venir a nosotros.