Semana del 19 de Febrero al 25 de Febrero de 2021

Ideologías cruzadas

Ideologías cruzadas

Fernando Garduza

Aunque suene extraño, ocurrirá que panistas y perredistas votarán por priistas; priistas votarán por panistas y morenistas; y podría ocurrir que priistas, panistas, perredistas y morenistas, voten por candidatos del Partido Verde.

Las próximas elecciones serán históricas no solo por el tamaño de la organización que deberán planear las instituciones electorales, sino porque por primera vez, en estados como San Luis Potosí, proyectos antagónicos se unirán para tratar de evitar el triunfo de la cuarta transformación, tal y como ocurrió en el 2018.

En el caso de la elección de gobernador, podría ocurrir que, por primera vez, el mandatario estatal sea electo no por sus bases ni su voto duro, sino por simpatizantes de otras corrientes políticas, y esto no se limita al caso de la coalición de PRI-PAN-PRD-PCP.

Quien sea el candidato de dicho proyecto conjunto, que por ahora se perfilan César Octavio Pedroza Gaitán, de entrada, no la tendrá fácil para ganarse el voto de los priistas, sobre todo del interior del Estado, y eso, ni siquiera por la presencia de la 4T.

Un gran problema al que se enfrentará, es que las dirigencias (énfasis en las del PRI y del PAN), no consultaron con sus bases la cuestionada coalición y decidieron de forma central coaligarse contra la 4T y poner en las mejores candidaturas a sus cabezas, situación que a todas luces es ventajosa y su militancia ha dado muestras de que no aceptará.

Hay casos en la zona Centro, la Huasteca y el Altiplano, dónde perfiles identificados con dichos partidos, como: David Medina Salazar, Adelaido Cabañas Hernández, Christian Joaquín Sánchez Sánchez, Alejandro Segovia Hernández, Cinthia Segovia Colunga, Ezequiel Juárez Rivera o incluso la renombrada panista Sonia Mendoza Díaz, podrían aparecer en la boleta bajo las siglas del Partido Verde.

La construcción del proyecto del PVEM, que muy seguramente será encabezado por José Ricardo Gallardo Cardona como candidato para la elección de gobernador, lleva varios años de operación y encontró en la alianza "Sí por San Luis" la justificación perfecta para agrupar a liderazgos de diversos partidos, lo cual, habrá de redituar en votos de priistas, panistas y perredistas a favor de este proyecto; sin embargo, hay que poner énfasis en que el proyecto de Gallardo es el único congruente y que no tiene ideologías cruzadas.

Retomando el tema de Octavio Pedroza, virtual candidato a gobernador por "Sí por San Luis", el hecho de que las bases, sobre todo priistas, no hayan sido consultadas, sobre todo en este estado, resulta de gravedad cuando se analiza la historia de batallas entre miembros de los partidos que integran en proyecto conjunto.

Y más aún, habrá perfiles totalmente identificados con el PRI y con el PAN, como José Luis Romero Calzada, Mónica Liliana Rangel Martínez o Sonia Mendoza Díaz, que pudieran aparecer en las boletas bajo las siglas de otros partidos como Morena, Redes Sociales Progresistas o el Verde, situación que incluso podría acabar por confundir al electorado.

El caso de Rangel Martínez es emblemático cuando se habla de ideologías cruzadas. Más allá de los cuestionamientos, no solo a su posible candidatura, sino a su postulación como precandidata de Morena, el hecho de que sea la mejor posicionada y esté en la antesala de ser candidata a gobernadora, en automático puso el ojo sobre el gobernador Juan Manuel Carreras López y fue señalado de entrometerse en el proceso interno de este partido.

Esta situación generaría que militantes y simpatizantes del PRI no apoyaran a Octavio Pedroza, sino que votaran por Morena con la garantía de que la doctora Rangel Martínez sería el perfil perfecto para mantener el poder político en manos del Revolucionario Institucional, y aunque en las urnas el triunfo fuera morenista, en la práctica el partido del presidente estaría prácticamente muerto.

Pero, en el caso de que también Romero Calzada apareciera en las boletas, la cantidad de votos que consiguiera sería casi en su totalidad del priismo, pues como tal, Redes Sociales Progresistas no cuenta con bases ni estructura.

Esta participación de priistas disfrazados en otros partidos y de panistas abanderando al PRI, dispersará el voto de tal forma que más allá de pensar en su militancia, los candidatos deberán pensar en convencer a los indecisos y que el porcentaje de votantes sea histórico para garantizar el triunfo.