"Donde una vez tuve un órgano sexual, ahora me dejaron con un palo entumido"

"Donde una vez tuve un órgano sexual, ahora me dejaron con un palo entumido"

La fimosis, que es cuando el prepucio se encuentra demasiado apretado para poder retirarse del glande, la circuncisión es la última opción de tratamiento

La Silla Rota| | Miércoles, 17 de Abril de 2019| 17:38

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El 27 de noviembre de 2017, Leslie Roberts recibió un correo electrónico de su hijo mayor, Alex Hardy, en el que le explicaba el motivo del suicidio que había cometido 12 horas antes: una circuncisión.

Acorde a lo dicho por Roberts para BBC Mundo, la cirugía a la que se sometió su hijo se debió a que Alex padecía fimosis, que es cuando el prepucio se encuentra demasiado apretado para poder retirarse del glande.

Entre las complicaciones, las cuales no son tan comunes, se incluyen dificultad para orinar y dolor durante las relaciones sexuales.

"Desde mi adolescencia me creó problemas de alcoba, ya que significaba que mi prepucio no se retraía sobre el glande como estaba previsto, lo que causó algunos momentos incómodos", detalla Alex en su correo de despedida.

Originario de Reino Unido, a los 18 años Alex decidió postergar su ingreso a la universidad para viajar y residir por algún tiempo en Canadá, hasta acumular cinco años viviendo en dicho país norteamericano, del que obtuvo la residencia. Simplemente Hardy se enamoró de Canadá.

Era conocido como ´el británico súper brillante´ con modales impecables", dice su madre. "El tipo súper inteligente del Reino Unido que ayudaba a las personas con sus solicitudes de residencia en Canadá", apunta su madre.

No obstante, los problemas que presentaba lo hicieron acudir a un consultorio médico para ser diagnosticado por un urólogo, quien de inmediato sugirió la circuncisión para tratar la fimosis de Alex. Corría el año de 2015. "Con cierto escepticismo lo acepté", explica.

Hardy era un chico muy tímido, por lo que no supo cómo hablar del tema con su familia o amigos.

En Inglaterra, el Servicio Nacional de Salud (NHS, por sus siglas en inglés) aconseja esteroides tópicos y técnicas de estiramiento, y la circuncisión como último recurso.

Luego de haber investigado más sobre el padecimiento y el doctor que operó a su hijo, Leslie encontró una serie de reseñas en las que aconsejaban acudir con otro médico debido al mal trabajo que este realizaba.

"Puedo ver cómo diagnosticó erróneamente a otros, cirugías fallidas y vidas arruinadas", decía una de las críticas. "Es peligrosamente incompetente" y "¡Huye antes de que salgas lastimado!", son otros de los ejemplos.

Luego del procedimiento, Alex no dejó las incomodidades que la nueva condición le causaba, pese a haber pasado cerca de dos años de la circuncisión.

Entre los malestares estaban una sensibilidad constante en la cabeza de su pene, que ya no estaba protegida por su prepucio; en contraste con la experimentación de disfunción eréctil.

En cuanto a la segunda, apuntó que se debió a la mutilación del frenillo, una banda de tejido donde el prepucio se adhiere a la superficie inferior del pene. Se trata de una de las zonas más erógenas, puntualiza el doctor Trevor Dorkin, miembro de la Asociación Británica de Cirujanos Urológicos, consultado por la cadena británica.

Alex también escribió acerca de sensaciones de ardor y picazón, en particular por una cicatriz que se encontraba donde se eliminó su frenillo.

Donde una vez tuve un órgano sexual, ahora me dejaron con un palo entumido y abatido", escribió. "Mi sexualidad ha quedado en ruinas".

Incluso en su texto compara la amputación del clítoris en el cuerpo femenino, con la mutilación de su miembro viril.

En este sentido, Alex pensaba que la circuncisión debería ser llamada Mutilación genital masculina, en alusión al nombre que lleva el procedimiento en mujeres, en el que se extrae parte o la totalidad de sus órganos sexuales.

"No creo en promover un género por encima del otro, pero creo firmemente que la igualdad de género tiene que ser alcanzada para todos", agregó en su carta.

Pese al tiempo que ha pasado desde su muerte, poco más de un año, la historia de Alex apenas ha alcanzado ver la luz en el mundo. La razón por la que Leslie accedió a difundir el testimonio de su hijo es porque él mismo lo pidió como un último deseo en el mail con el que se despidió de su familia.

Si esta información le puede servir a alguien, entonces ha cumplido su propósito", escribió; y agregó "Estamos parados sobre los hombros de aquellos que vinieron antes que nosotros".

djh